martes, 24 de septiembre de 2024

MÓDULO 1

Buenas a tod@s,

Aunque no coincide directamente con mi actividad profesional actual (funcionario interino), podemos afirmar que los cargos políticos son los superiores jerárquicos de los funcionarios de forma temporal a elección de los ciudadanos, por ello, me parece interesante realizar un breve análisis del estudio sobre cargos políticos realizado por el Instituto de las Mujeres y publicado en septiembre de 2024.

Tomando como base la infografía (https://www.inmujeres.gob.es/MujerCifras/Infografia/Docs/2024/202409_Politica.pdf), podemos señalar las siguientes conclusiones en torno a la desigualdad en el ámbito de los cargos políticos:

1.- En España nunca ha habido una Presidenta del Gobierno.

2.- Aunque la presencia de mujeres en el Congreso y Senado se aproxime al 50%, las cabezas de listas provinciales siguen siendo ocupadas mayoritariamente por hombres.

3.- Más de la mitad de los Parlamentos Autonómicos no ha sido presidido nunca por una mujer.

4.- Menos del 25% de las Alcaldías están dirigidas por mujeres.

5.- De los partidos políticos con representación en el Congreso, sólo 1 de cada 4 están liderados por mujeres.

6.- Apenas el 30% de los puestos de la jefatura de gabinetes están ocupados por mujeres.

7.- Ninguna mujer ha ejercido la representación española ante la ONU, OTAN y UE, y sólo 1 de cada 4 embajadas están encabezadas por mujeres.

A la vista de los datos anteriores, podemos deducir que en el ámbito de la política, todavía queda mucho por recorrer en lo que a la igualdad entre mujeres y hombres se refiere.

En lo que respecta al origen y mantenimiento de esta desigualdad, desde mi punto de vista, entiendo que se fragua en 2 aspectos muy relevantes, la cultura y la educación. Aunque desde la educación pública se intente formar a las nuevas generaciones en el concepto de igualdad, hay que tener en cuenta que la educación y cultura adquirida en el ámbito familiar y social puede entrar en conflicto con la primera, ya que los adultos y mayores de hoy día son el producto de una educación y cultura anterior a estos valores de igualdad, asunto que se puede ver reflejado a la socialización diferencial entre niñas y niños.

Considero que, como posible solución a esta diferencia educacional y cultural, podría llevarse a cabo a través de los centros de enseñanza, programas de fomento de los valores de igualdad que implicaran a los familiares de las alumnas y alumnos.

Muchas gracias.

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